El museo de Louvre, una de las joyas más preciadas de Francia y del mundo entero.
París es considerada una de las cunas del arte y la cultura y con justa razón. Varios personajes importantes del arte nacieron en Francia y sus obras han cautivado a miles de personas a través de los años. Degas, Cézanne, Gauguin, Matisse, Kupka y muchos más son un ejemplo de esto, no es de extrañarse que sea la casa del museo más famoso del mundo.
El Famoso museo del Louvre no solo es la residencia de varias obras de estos grandes artistas, es una joya de la arquitectura. La fachada es impresionante y la extensión de este te roba el aliento, a la entrada tiene 3 pirámides de cristal, la principal fue diseñada por el arquitecto Ming Pei y se inauguró en 1989, justo en el bicentenario de la Revolución Francesa.
Louvre fue abierto desde 1973 para el público, antes de eso las obras que ahí se exponen eran para recorridos exclusivos y realmente privilegiados para la alta sociedad. Anteriormente el Palacio de Louvre se utilizaba como residencia real y ha sido modificado poco a poco hasta volverse un recinto perfecto para las obras de arte que protege.
El Museo de Louvre tiene en su colección más de 300,000 obras, de las cuales solo se exponen 35,000 ya que las demás permanecen en resguardo en el sótano del edificio, ya sea por que son colección privada, algunas en restauración y algunas son expuestas solo en temporadas. Entre las colecciones de arte que puedes apreciar encontrarás: Antigüedades Orientales, Arte Islámico, Antigüedades Egipcias, Griegas, Etruscas y Romanas, y pinturas, esculturas, dibujos y grabados de la época moderna y hasta 1848, un departamento sobre la historia del mismo Louvre y 21 salas dedicadas a la pintura italiana y española de los siglos XVI y XVII.
Es importante que ubiques tus obras favoritas para ahorrarte un poco de tiempo si es que tu viaje a París es corto.
Entre las obras imperdibles que se exponen en Louvre están: La Venus de Milo de la Antigua Grecia, La Gioconda de Leonardo da Vinci, La Libertad Guiando al Pueblo de Delacroix y Las Bodas de Caná de Veronés.
La exposición está perfectamente organizada para que puedas disfrutar de ella en el menos tiempo posible pero a pesar de ello, toma al menos dos días para poder recorrer cada uno de sus pasillos. Para poder entrar te tomarás un tiempo en las fila pero es una espera que valdrá completamente la pena, hoy en día el Museo de Louvre es el museo más visitado del mundo.
Te recomendamos reservar tus tickets antes de llegar a París para segurar tu entrada al Louvre aquí.
A pesar de no ser un fanático del arte, el recorrido es imprescindible, pues además de las grandes obras, la arquitectura que posee el edifico entero es fascinante, además de que es el spot perfecto para llenar tu cámara con fotos increíbles.